vivía en la boca pero escuchaba los partidos de san lorenzo por radio, cuando los gatos en celo lo dejaban. bayer lo llevó a la academia germana y fue mejor recibido que en el aula magna de la uba. osvasldo jugaba al fútbol en cipoletti y escribía sobre esos sueños que para nosotros eran aventuras de la tierra y las siestas. crecer es extrañar a los que se van antes. evitar la nostalgia es medicina. 'la hora sin sombra' quedó sin terminar (¿quedó sin terminar?). poesías de calles oscurecidas por neones sucios, plazas repletas de hojas que quieren volver a la tierra. por las tardes, cuando bajo del tren y entro al patio, micca me mira y sacude la cola, la lunática se trepa a mis piernas y espera. más tarde viene -somnoliento- ramone, el batmita; es hora de escuchar: '...en la mesa se hizo un pesado silencio. el embajador británico sacó la foto en la que el commendatore tacchi tomaba a daisy en sus brazos y la arrojó sobre la mesa golpeando con los nudillos...'. los felinos escuchan con orejitas en punta, rodeándome, ronroneándome...
lunes, 21 de diciembre de 2009
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