enero 2010

me levanté tipo 11, tomé un vaso alto de agua lleno y fuí por el diario y el libro de pedro lemebel. pedí disculpas a jorge por chat y armé el mate. papá estaba en en el jardín luchando con una de las patillas de sus lentes de aumento. más tarde comimos milanesas de soja con ensalada de tomate y fuimos a la estación malaver. el tren llegó puntual y, ya en retiro, tomamos sprite con amigos de coronel suárez. dad subió a un pulki rumbo a santa fé y yo volví al mitre, a sumergirme en el 'sumo por pettinato'. en casa esperaban mum, kat, nora y abu jugando a las cartas. comían maní y se reían del susto del pequeño perro frente al batmita. puse cat power en los parlantes y llegaron los demás, justo para el mate. a la noche destapé un vino espumoso y brindé por ignacio y los amigos del under. mi bajo de tres cuerdas transpiró 'bye bye baby' y me recosté nuevamente junto al libro de roberto. conozco la historia pero no puedo parar de leér. en el kiosko me miran mal hasta que aporto el cambio justo y digo la palabra clave: 'felicidades'. mañana a las siete tengo que estar despierto para ir a la casa de audiometrías y , más tarde, pasar por kiosko/12 y el colegio de escribanos. luego lo de siempre: colarse en el mitre y llegar a los brazos del sol.

todas las mañanas le digo 'gracias' al gauchito, cuando paso por el parque de agronomía, cerca del club comunicaciones (comu) y, después, frente al alvear. él me acompaña y presta sus pantalones rotos al chico de seattle.