es sábado y no hay nada que hacer afuera. pongo el triple de the magnetic fields. las 69 canciones son, en realidad 68, porque una se la quedó ares. una a una las melodías de stephen pasan y conmueven y me pregunto cómo diablos se hace para componer un disco así. el mate uruguayo se acaba y no paro de llorar. mi chica está a un tren y un colectivo de mi cama y acá, entre las luces, sólo puedo retorcer las gabeedolls y poner en orden mi agenda. merritt canta y -a veces- llora pop, punk, folk. desesperado agarro el bajo y no sale nada comparado a eso. preparo más yerba y mientras, allá en la tv, la vedette transpira botines de selección, última cosecha.
sábado, 17 de octubre de 2009
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